2 de febrero de 2015

Triquis de Copala denuncian amenazas y cobro de piso por el Colectivo La Jícara de Xochipilli

Por: Cristina Hernández


La representante de un grupo de desplazados de San Juan Copala, acusó a integrantes del Colectivo La Jícara de Xochipilli de cobrar derecho de piso hasta por 200 pesos y lucrar con el espacio que el magisterio les permitió en la Alameda y Zócalo en el marco del plantón de la Sección 22 del SNTE.

Lorena Merino Martínez, una de las indígenas de San Juan Copala, con lágrimas en el rostro, dijo que esa organización los ha amedrentado, amenazado y les ha quitado espacios. 

Desde la Alameda con García Vigil señaló que en apoyo a la Sección 22 del SNTE, se instalaron en esos espacios para así tener una fuente para tener ingresos económicos para sustentar a sus familias. 

"Nos dieron espacio para instalarnos pero el Colectivo La Jícara de Xochipilli que es de personas golpeadores y drogadictos siempre nos han molestado desde que se instaló el plantón magisterial a la fecha", se quejó. 

“Nos han amenazado, amedrentado, nos han insultado, nos han dicho cosas que sufríamos en la zona triqui”, dijo para soltar en llanto porque nadie les garantiza el derecho al trabajo.

"Quisiera acudir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que nos garanticen nuestros derechos", expresó. 

Pidió apoyo a las organizaciones nacionales e internacionales para que estas familias tengan garantías que desde hace años perdieron por no poder regresar a su comunidad de origen que es San Juan Copala. 

"No estamos por un recurso, sino por la exigencia de regresar a nuestra comunidad pero Mario y Alejandro del Colectivo La Jícara de Xochipilli están cobrando derecho de piso", dijo.

Aseguró que han sido afectadas al menos 20 personas con sus hijos porque esos supuestos líderes les cobran a su gente 200 pesos y a los demás, igual quieren actuar. 

"Ellos (Colectivo La Jícara) quieren ocupar el espacio para poder venderlo y cobrar derecho de piso para tener recursos económicos", por eso urgió atención del gobierno y de los dirigentes de la Sección 22 del SNTE.