A la opinión pública
A los medios de comunicación
A los maestros de la Sección XXII de la CNTE
Las y los beneficiaros de las Medidas Cautelares MC-197-10 de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y desplazados de San Juan Copala, nos pronunciamos en contra de la Reforma Educativa que Enrique Peña Nieto y sus aliados Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN) y Partido de la Revolución Democrática (PRD), pretenden aprobar e imponer en contra de la voluntad y derechos de los maestros, estudiantes y pueblo en general.
Asimismo, apoyamos y solidarizamos incondicionalmente a la digna y justa lucha que los maestros de la Sección XXII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores del Estado (CNTE), están llevando en contra de la nefasta y mal llamada Reforma Educativa (que en realidad es laboral): uno para los trabajadores de la educación; otro para los estudiantes y egresados de las normales y; otro más para los padres de familia y sociedad en general.
La Reforma Educativa no sólo atenta contra los derechos del pueblo mexicano en general sino también atenta contra los derechos de los pueblos indígenas y comunidades del país como son derecho a la consulta, derecho al trabajo, derecho a la no discriminación, derecho a la educación tradicional o bilingüe, entre otros derechos indígenas que están contemplados y reconocidos en el artículo 2 de la Constitución Política Mexicana, el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos indígenas y la Ley General de Derechos Lingüísticos de los Pueblos Indígenas, misma que también es excluyente, racista, perjudicial, ofensiva, evita la formación de personas críticas y profesores bilingües, promueve el individualismo y amplía la brecha educativa y social entre los mexicanos.
Nuestros pueblos y comunidades indígenas no necesitan Reforma Educativa que lesionen y menoscaben sus derechos, lo que necesitan son escuelas, educación bilingüe, maestros bilingües, mayor presupuesto para la educación bilingüe, becas, pase automático de los estudiantes indígenas a los bachilleratos y universidades públicas del país, albergue, biblioteca, computadoras, entre otras necesidades.
Es por ello que las y los desplazados de San Juan Copala, demandamos la abrogación de las reformas a los artículos 3 y 73 constitucionales del decreto con fecha 26 de febrero del 2013 impuesto por Enrique Peña Nieto y la invalidez de sus leyes secundarias por ser contrarias a los derechos establecidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en los instrumentos internacionales de derechos humanos e indígenas.
Reiterando nuestro incondicional apoyo y solidaridad a los maestros de la Sección XXII de la CNTE por ser justas y dignas su lucha, peticiones y exigencias en defensa de la educación pública, laica y gratuita del país.
Respetuosamente
Las y los desplazados de San Juan Copala